Pasaje: Salmos 37 - Versión: Reina Valera 1995
El camino de los malos
1No te impacientes a causa de los malignosni tengas envidia de los malhechores, 2porque como la hierba serán pronto cortados
y como la hierba verde se secarán. 3Confía en Jehová y haz el bien;
habitarás en la tierra y te apacentarás de la verdad. 4Deléitate asimismo en Jehová
y él te concederá las peticiones de tu corazón. 5Encomienda a Jehová tu camino,
confía en él y él hará. 6Exhibirá tu justicia como la luz
y tu derecho como el mediodía. 7Guarda silencio ante Jehová y espera en él.
No te alteres con motivo del que prospera en su camino,
por el hombre que hace lo malo. 8Deja la ira y desecha el enojo;
no te excites en manera alguna a hacer lo malo, 9porque los malignos serán destruidos,
pero los que esperan en Jehová heredarán la tierra, 10pues dentro de poco no existirá el malo;
observarás su lugar, y ya no estará allí. 11Pero los mansos heredarán la tierra
y se recrearán con abundancia de paz. 12Maquina el impío contra el justo
y rechina contra él sus dientes. 13El Señor se reirá de él,
porque ve que viene su día. 14Los impíos desenvainan espada y tensan su arco
para derribar al pobre y al menesteroso,
para matar a los de recto proceder. 15Su espada entrará en su mismo corazón
y su arco será quebrado. 16Mejor es lo poco del justo
que las riquezas de muchos pecadores, 17porque los brazos de los impíos serán quebrados;
mas el que sostiene a los justos es Jehová. 18Conoce Jehová los días de los íntegros
y la heredad de ellos será para siempre. 19No serán avergonzados en el tiempo de dificultad,
y en los días de hambre serán saciados. 20Mas los impíos perecerán,
los enemigos de Jehová serán consumidos;
como la grasa de los carneros,
se disiparán como el humo. 21El impío toma prestado y no paga;
pero el justo tiene misericordia y da. 22Los benditos de él heredarán la tierra
y los malditos de él serán destruidos. 23Por Jehová son ordenados los pasos del hombre
y él aprueba su camino. 24Cuando el hombre caiga, no quedará postrado,
porque Jehová sostiene su mano. 25Joven fui y he envejecido,
y no he visto justo desamparado
ni a su descendencia que mendigue pan. 26En todo tiempo tiene misericordia y presta.
Su descendencia es para bendición. 27Apártate del mal, haz el bien
y vivirás para siempre, 28porque Jehová ama la rectitud
y no desampara a sus santos.
Para siempre serán guardados,
mas la descendencia de los impíos será destruida. 29Los justos heredarán la tierra
y vivirán para siempre en ella. 30La boca del justo habla sabiduría
y su lengua habla justicia. 31La Ley de su Dios está en su corazón;
por tanto, sus pies no resbalarán. 32Espía el impío al justo
y procura matarlo. 33Jehová no lo dejará en sus manos
ni lo condenará cuando lo juzguen. 34Espera en Jehová,
guarda su camino,
y él te exaltará para heredar la tierra;
cuando sean destruidos los pecadores, lo verás. 35Vi yo al impío sumamente enaltecido
y que se extendía como laurel verde. 36Pero él pasó, y he aquí ya no estaba;
lo busqué, y no lo hallé. 37Considera al íntegro y mira al justo,
porque hay un final dichoso para el hombre de paz. 38Mas los transgresores serán todos a una destruidos;
la posteridad de los impíos será extinguida. 39Pero la salvación de los justos es de Jehová
y él es su fortaleza en el tiempo de angustia. 40Jehová los ayudará y los librará;
los libertará de los impíos y los salvará,
por cuanto en él esperaron.
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