Saltar al contenido

Pasaje: 1 Corintios 10:23-33 - Versión: Reina Valera 1960

 23Todo me es lícito, pero no todo conviene; todo me es lícito, pero no todo edifica. 24Ninguno busque su propio bien, sino el del otro. 25De todo lo que se vende en la carnicería, comed, sin preguntar nada por motivos de conciencia; 26porque del Señor es la tierra y su plenitud. 27Si algún incrédulo os invita, y queréis ir, de todo lo que se os ponga delante comed, sin preguntar nada por motivos de conciencia. 28Mas si alguien os dijere: Esto fue sacrificado a los ídolos; no lo comáis, por causa de aquel que lo declaró, y por motivos de conciencia; porque del Señor es la tierra y su plenitud. 29La conciencia, digo, no la tuya, sino la del otro. Pues ¿por qué se ha de juzgar mi libertad por la conciencia de otro? 30Y si yo con agradecimiento participo, ¿por qué he de ser censurado por aquello de que doy gracias? 31Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios. 32No seáis tropiezo ni a judíos, ni a gentiles, ni a la iglesia de Dios; 33como también yo en todas las cosas agrado a todos, no procurando mi propio beneficio, sino el de muchos, para que sean salvos.

Copyright © 1960 by American Bible Society (http://www.americanbible.org)
Ver en otras versiones: